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1.Determine el tamaño de la incubadora que necesita. Las incubadoras vienen en diferentes tamaños y pueden acomodar desde uno hasta miles de huevos. La capacidad dependerá de su proyecto y su experiencia con la incubación. Si no tiene conocimientos sobre incubación le conviene comenzar con incubadoras pequeñas.

2- Considere los accesorios adicionales que ofrece la incubadora. Algunas incubadoras tienen pantallas LCD que le permiten controlar la temperatura y la humedad, y también pueden tener una ventilación mejorada para un mejor control de la temperatura y humedad.

3. Elegir una incubadora con una buena garantía. Esto le ayudará a asegurarse de que la incubadora está construida con buenos materiales y que se puede reparar si hay algún problema.

4. Asegúrese de que la incubadora sea fácil de limpiar. Esto ayudará a mantener la incubadora limpia y libre de bacterias.

5. Asegúrese de que la incubadora sea fácil de usar. Una incubadora con una interfaz intuitiva y un manual claro le ahorrará tiempo y esfuerzo.

6. Revise el costo del equipo. Algunas incubadoras de huevos tienen un precio elevado, especialmente las de mayor tamaño.

7. Elija un modelo confiable. Lea las opiniones de otros usuarios para asegurarse de que la incubadora sea de buena calidad o cumple con lo que usted espera del equipo.

8. Compre en una tienda con un buen servicio de atención al cliente, para que pueda obtener ayuda si surge algún problema con el equipo.

Elegir la incubadora correcta para usted que se ajuste a su proyecto le proporcionara facilidad de uso, bajo mantenimiento y bajo costo.

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El crecimiento embrionario se optimiza con una concentración de dióxido de carbono en el aire del 0,4% pero el crecimiento embrionario baja o disminuye además de que la mortalidad aumenta con concentraciones de dióxido de carbono superiores al 1%. La atmósfera normal contiene un 21% de oxígeno y un 0,04% de dióxido de carbono. El pollito formado es más susceptible a la desviación de oxígeno (en comparación con el pollito aun como embrión en el huevo), lo que implica que la tasa de ventilación y la concentración de dióxido de carbono son más críticas en la fase final de la incubación.

 

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Almacenamiento de los huevos fértiles

Los huevos fértiles deben estar limpios y secos y almacenarse a una temperatura de entre 12 y 15ºC y con una humedad relativa del 65%, con el extremo pequeño hacia abajo.

Los huevos deben girarse 90 grados al menos una o dos veces al día. La incubabilidad óptima se consigue en huevos frescos de menos de 10 días, pero se puede obtener una incubabilidad razonable en huevos de hasta 14 días de edad. Los huevos fértiles deben mantener un peso relativamente constante con una mínima pérdida de peso durante el almacenamiento. Las temperaturas superiores a 25°C pueden iniciar la replicación celular de la célula germinal en la yema del huevo fértil y aumentarán la mortalidad embrionaria y reducirán la incubabilidad. Las temperaturas inferiores a 10°C pueden inactivar la célula germinal.